Albondigas de carne y quinoa. Receta fácil y sencilla
Albondigas de carne y quinoa. Receta fácil y sencilla
Albóndigas de carne y quínoa
Los granos de quínoa poseen los 8 aminoácidos esenciales para el ser humano, son de fácil digestibilidad y pueden ser usados en muchas elaboraciones. Además de en guisos, los granos también se usan para elaborar cerveza, o se tuestan y se muelen para convertirlos en harina, que puede ser usada para hacer panes.
Hoy os proponemos la receta de unas ricas albóndigas de quínoa y carne picada, un plato de un elevado valor nutricional.
Un magnífico acompañante para estas albóndigas puede ser nuestra salsa de tomate a la portuguesa.
INGREDIENTES [Para 24 albóndigas]:
- Pan integral seco (cortezas cortadas) - 2 rebanadas
- Carne picada - 100 gramos
- Cebolla - 1
- Ajo - 2 dientes
- Perejil seco - 2 cucharadas
- Zanahoria - 1/2
- Levadura de cerveza - 2 cucharaditas
- Germen de trigo - 1 cucharadita
- Sal - 1 cucharadita
- Curry - 1 cucharadita
- Canela en polvo - 1/2 cucharadita
- Champiñón - 4
- Huevo - 1
- Nueces - 14
- Harina de trigo integral - 3 cucharadas
- Quínoa roja - 1 taza
- Aceite de oliva - Para freír
- Harina blanca - Para rebozar
ELABORACIÓN DE LA RECETA ALBÓNDIGAS DE CARNE Y QUÍNOA
02. En una sartén mediana, ponemos a calentar un poco de aceite de oliva. Freímos la carne picada hasta que comience a dorarse.
03. Ponemos el pan, las nueces, el perejil y las especias en un procesador de alimentos, trituramos hasta que todos los ingredientes queden lo más finamente posible.
04. A continuación, pelamos y cortamos en trozos la cebolla, la zanahoria y los ajos. Limpiamos los champiñones. Echamos en el vaso del procesador de alimentos, junto con los ingredientes ya procesados. Trituramos durante unos segundos. Ponemos la mezcla en un cuenco.
05. Añadimos al cuenco la levadura, el germen y la sal. Mezclamos bien.
06. A continuación, echamos en el cuenco la quínoa cocida, el huevo , la carne picada y la harina integral. Mezclamos con las manos hasta que quede una mezcla muy espesa. Meter en el refrigerador durante media hora.
07. Ponemos una capa de harina sobre un plato grande. Cogemos dos cucharadas de la mezcla y, con la ayuda de las manos, formamos una bola. A medida que formamos las bolas, las ponemos en el plato para enharinarlas bien. Repetimos el proceso hasta acabar con toda la mezcla.
08. Una vez formadas las albóndigas, las metemos al frigorífico durante 40 minutos.
09. Pasado el tiempo de refrigerado, calentamos abundante aceite de oliva en una sartén antiadherente. Freímos las albóndigas por tandas, dándoles la vuelta para que se doren por ambos lados. A medida que las vamos sacando de la sartén las ponemos sobre papel absorbente para retirar el exceso de aceite.
Comentarios
Publicar un comentario